Desde el viernes 2 de mayo por la tarde se podía ver en la carretera (D-55) que une Ovalle y Combarbalá, peregrinos a pie y a caballo con la fe intacta de poder llegar y venerar a la sagrada imagen de la Virgen de La Piedra en la localidad de La Isla, a unos 20 kilómetros de Combarbalá, donde estaba todo preparado para la gran jornada religiosa de la zona.
El escenario estaba dispuesto desde hace días. La comunidad cristiana del lugar, junto a la Ilustre Municipalidad de Combarbalá trabajaron con ahínco para que todos los detalles estuvieran al día “hemos apoyado a la comunidad del sector con el trabajo de maquinaria municipal que ha mejorado los caminos de acceso vehicular; además pudimos realizar un trabajo de electrificación básica en aquellos sectores más transitados para que la vía sea expedita, además de habilitar en el sector donde llegan los buses con los bailes religiosos, más puntos de acceso a agua potable; nuestros funcionarios de distintos departamentos estarán trabajando en el lugar durante todo el fin de semana, de manera que esta fiesta religiosa reciba a los fieles de la mejor manera posible”, señaló el alcalde de Combarbalá, doctor Pedro Castillo.
BAILES “CHINOS”
Una de las tradiciones que sustenta la festividad de la Virgen de La Piedra, es la gran cantidad de fieles que realizan Bailes Chinos, quienes llegan hasta el sector de la explanada, donde la costumbre indica que se debe saludar al Cacique de la Festividad, José Castillo, quien desde hace 23 años lidera la actividad “desde hace tres generaciones que hacemos esto. Partió con mi abuelo, luego mi padre, y ahora yo he continuado esta tarea, porque somos mandantes a perpetuidad, o sea veneramos a la Virgen hasta el día en que la muerte nos lo impida”, afirma don José con una tranquilidad que le otorga una solemne presencia con su tocado de cacique. “Acá nos organizamos de tal manera que todos los danzantes que lleguen hasta El Santuario, puedan estar lo más cómodos posibles, porque es un gran esfuerzo económico y humano para ellos, y la idea es poder venerar a nuestra Señora Virgen de La Piedra, con la mayor fuerza posible”, sostiene El Cacique.
La Iglesia Católica inicia desde temprano su labor evangelizadora, con un calendario de misas que se realizan en la capilla y también el sector de La Gruta, para que los devotos lleguen hasta su divina presencia, tal como sucedió este sábado a eso de las 19 horas, cuando el sonido de tambores, flautas y diversos instrumentos, transforman la tranquilidad de La Isla, en un verdadero carnaval, que sube hasta los pies de la venerada imagen de La Virgen de La Piedra, desde donde se observa una marea humana que sostiene velas encendidas al paso de los danzantes, y que este domingo 4 de mayo, duplicará su fulgor, cuando se cierre la fiesta, hasta el próximo primer fin de seman de mayo de 2015.
