La nueva y moderna sede luce resplandeciente entre los soleados cerros y abruptas quebradas donde viven. Un sueño hecho realidad para los habitantes del apartado sector de Altos de San Valentín, que hasta ahora no tenían un lugar común para desarrollar su organización vecinal. Y la entrega de este espacio social, completamente amoblado, fue celebrada con ceremonia.
Dirigentes vecinales y representantes del Grupo Empresas Chilquinta encabezaron la inauguración de la nueva sede de la Comunidad Altos de San Valentín, ubicada en el sector El Rosario, comuna de La Serena.
La entrega de estas instalaciones está enmarcada en la apertura de oportunidades a las comunidades y es parte del activo compromiso del Grupo Empresas Chilquinta, a través de su transmisora Eletrans III, bajo el proyecto de la línea Nueva Maitencillo – Punta Colorada – Nueva Pan de Azúcar 2×220 kV.
Representados por María Erika Delanoe, Presidenta de la agrupación, los propios vecinos recibieron formalmente la infraestructura de manos de Paulina Guzmán, Gerenta de Sostenibilidad de Chilquinta, Álvaro Alarcón, subgerente general de Eletrans y Andrés Quintana, subgerente de Medioambiente y Comunidades de Chilquinta.
Con un corte de cinta para inaugurar la infraestructura se entregó oficialmente la sede y las instalaciones complementarias.
“En representación de todos mis vecinos, decir que estamos muy felices porque esto es algo que veníamos persiguiendo desde aproximadamente el período 2018-2019. El 2023 pudimos concretarlo mediante un convenio y hoy estamos celebrando. Tenemos muchas expectativas de lo que podamos hacer con esta sede. Estamos muy agradecidos del proyecto realizado con Eletrans”, destacó María Erika Delanoe, Presidenta de la Agrupación Altos de San Valentín.
Paulina Guzmán, Gerenta de Sostenibilidad de Chilquinta Energía, expresó su satisfacción por esta iniciativa, indicando que “gracias a este espacio, podemos contribuir a la capacidad de organización y encuentro en esta sede social. Nos enorgullece mucho ser parte de un proyecto de este tipo, porque vemos reflejados recursos provistos por la empresa mediante un acuerdo voluntario, pero que va mucho más allá, buscando dejar un legado que mejore la calidad de vida de quienes residen en el sector”.
Para concretar esta iniciativa, se extendió un proceso de diagnóstico participativo y reuniones de trabajo, mediante los cuales la propia comunidad priorizó la construcción de la sede social, como su prioridad, para así mejorar su organización y generar instancias de encuentro y desarrollo local.
“Esto es un sueño para la gente de esta zona. Un sueño que se cumple. Yo creo que nos va a servir mucho, sobre todo para cohesionar un poco a la gente, a través de cursos, talleres, lo que para un sector que está más alejado de la zona urbana, hacía mucha falta”, agregó la vecina María Alejandra Rubio, a lo cual se sumó Homero Casanga, indicando que “mientras el esfuerzo entre la empresa privada y la comunidad se haga de buena manera, siempre habrá mayor unidad y posibilidades para cooperar”.
Álvaro Alarcón, Subgerente de Eletrans, enfatizó en que “Hubo muchas reuniones para comprender con precisión las necesidades en ambas direcciones. Pienso que es reconfortante para ellos ver que el proyecto, que se puso en servicio hace un año, continúa siendo parte de la presencia de la empresa en este lugar, lo cual es parte de nuestro compromiso de estar aquí de forma permanente a través de nuestra operación”.
Como parte de este proceso voluntario, impulsado por el Grupo Empresas Chilquinta, se gestionó y proporcionó un aporte de $120 millones destinado a la materialización del proyecto, en un terreno cuya propiedad es de dicha agrupación, a lo cual se sumó la adquisición de estanques de agua.
Consuelo Tapia, secretaria de la Agrupación Altos de San Valentín, se manifestó muy feliz con la iniciativa y aseguró que “concretamos objetivos maravillosos que, no solamente, benefician a un grupo de familiares sino a toda una comunidad. Esta sede, finalmente, es un beneficio que van a poder aprovechar más de 500 personas y, por qué no, hacerlo más grande”.
Andrés Quintana, Subgerente de Medioambiente y Comunidades de Chilquinta, expresó que “hubo mucha comprensión de las partes. Los vecinos exploraron las posibilidades de que nuestra empresa se acercara a la gente y pudiéramos colaborar en este tremendo proyecto que tenemos hoy en día. Lo más importante para nosotros es que las personas que pertenecen a este sector rural puedan tener una conexión entre ellos, y estas acciones ayudan a la comunidad”.
El proyecto de la línea Nueva Maitencillo – Punta Colorada – Nueva Pan de Azúcar de Eletrans, atraviesa cinco comunas, La Higuera, La Serena y Coquimbo, en la región del mismo nombre, y Freirina y Vallenar en la región de Atacama, lugares donde también se están desarrollando otros proyectos en beneficio de la comunidad.
El Grupo Empresas Chilquinta reitera su compromiso junto a las comunidades, para así avanzar en iniciativas que mejoren la calidad de vida de las personas y sus familias.









