El doctor Enrqiue Paris, pediatra del Hospital Clínico UC, entrega 10 recomendaciones para evitarlas, o saber qué hacer ante la sospecha de su mordedura.
Son escurridizas y se esconden en la oscuridad. Se mueven sigilosamente por los rincones más insólitos de nuestras casas. Puedes encontrarlas detrás de un cuadro, en tu sofá o entre tus ropas. Estamos hablando de Loxosceles Laeta también conocida popularmente como la araña de rincón, que se ha convertido en una amenaza, debido a la gravedad de su mordedura.
Según el doctor Enrique París, pediatra y toxicólogo del Hospital Clínico Universidad Católica, esto último depende de varios factores, entre los que se cuentan la talla del paciente, el tamaño de la araña y la cantidad de veneno inoculado.
Si bien la araña de rincón no es agresiva y su mordedura se produce por defensa ante la imposibilidad de huida o cuando resulta aplastada por el cuerpo de alguna persona, hay una serie de medidas que se deben realizar para su prevención:
1. Mantener una buena limpieza en todas las habitaciones del hogar, detrás y debajo de los muebles, rincones, parte posterior de los cuadros, detrás del lavaplatos y artefactos de baño. Aspirar prolijamente en forma periódica.
2. Separar las camas de las paredes para evitar que al bajar las arañas lo hagan por ellas.
3. No colgar ropas ni toallas en los muros o puertas.
4. Revisar y sacudir la ropa, zapatos y toallas antes de usarlos.
5. Evitar que los niños jueguen a la escondida al interior del clóset o rincones que no hayan sido 6. previamente aseados.
6. Retirar los montones de leña y otros desperdicios de las áreas exteriores de su domicilio donde las arañas pueden vivir.
7. Frente a una mordedura sospechosa es fundamental lavar la piel con agua fría y jabón y aplicar hielo en la zona de la mordedura en forma intermitente y a tolerancia, el hielo ayuda a inactivar el veneno de la araña que es más activo a altas temperaturas.
8. Nunca se debe succionar la herida.
9. La mordedura de araña de rincón produce una lesión cutánea que puede ir desde una irritación insignificante hasta una importante ulceración con síntomas sistémicos.
10. En un inicio la mordedura suele ser relativamente dolorosa, clásicamente hay eritema (enrojecimiento), edema (inflamación) y sensibilidad, con el paso de las horas el eritema es reemplazado por una decoloración violácea característica en la piel que se extiende alrededor del sitio de la mordedura. Ante síntomas o una picadura o herida de origen desconocido que sea persistente, consultar inmediatamente a un Servicio de Urgencia o algún especialista.
Fuente: Departamento de Comunicaciones Red Salud UC
